Educación y equidad, de José Saturnino Martínez García

He mencionado en Twitter el libro de José Saturnino Martínez García, La equidad y la educación
La obra es de 2017 y se dirige a un lector familiarizado con la educación y con las pruebas internacionales, como PISA, TIMSS; PIAAC. De todos modos, no es imprescindible pertenecer a la profesión docente. Por el contrario, es una lectura que auguro muy provechosa para profesores y maestros, sí, pero aún más si cabe para padres de niños y jóvenes en edad escolar.

Hoy he recordado esta reciente y magnífica lectura a propósito de un titular de El Diario de Educación visto en Twitter que ponía en boca del profesor Martínez García estas palabras: "Según PISA, lo único que hacen mejor las escuelas concertadas y privadas es seleccionar socialmente al alumnado". Todo lo que dice José Saturnino Martínez García en esta entrevista, tiene un cumplido desarrollo, con citas, datos e interpretaciones en el libro que reseño.


El titular es llamativo y ha irritado a todos los furibundos partidarios de las escuelas privadas que se sostienen con dinero de todos, pero no admiten a todos. Los subterfugios de la escuela concertada para escoger al alumnado, las peripecias para ser seleccionados por la dirección de un colegio concertado, que padecen las familias que buscan en la escuela más distinción que otra cosa, muestran su rostro más descarnado en el desparpajo con que, recientemente, las páginas web de colegios concertados anuncian la necesidad de que los padres superen una entrevista antes de presentar su solicitud. Si quieres verlo, aquí puedes ver detalles.

De la entrevista, subrayo un párrafo que no tiene mucho que ver con el libro, pero que merece ser destacado y comentado. A la pregunta de cómo valora el profesor Martínez la promesa del PSOE de subvencionar las matrículas universitarias de las chicas en la carreras STEM, para aumentar la proporción de mujeres en las carreras científicas y técnicas, responde con verdadera gracia:

Pues la mitad del trabajo ya está hecho. En Ciencias y Matemáticas desde hace tiempo la matrícula está más o menos igualada. Las diferencias permanecen en las ingenierías. Si tenemos en cuenta que para el alumnado becado las carreras son gratuitas, y no por eso van más mujeres becadas (creo), no me parece que la medida vaya a tener mucho éxito, aunque sea bienintencionada. El coste de la matrícula posiblemente sea una parte pequeña de una decisión tan importante como elegir profesión. Además, para que la medida fuese equitativa tendríamos que actuar también sobre las carreras muy feminizadas, para que entrasen más hombres, si no, no va a ser posible la igualación.

En efecto,¿y si las medidas para interesar a las chicas en las carreras ténicas estuvieran saturadas y fuera más efectivo, si de lo que se trata es de equilibrar las proporciones de hombres y mujeres, potenciar la presencia de varones en carreras de Humanidades y Ciencias Sociales? A veces, el sentido común y las interpretaciones de lo obvio no son el punto fuerte de los políticos.